Tomasinos representan a Colombia en mundial de fútbol robótico
miércoles, 22 de junio de 2016
Los futbolistas robóticos de la Universidad Santo Tomás han participado en diferentes competencias nacionales e internacionales dejando en alto el nombre de nuestro país y ratificando la calidad de las investigaciones que se desarrollan en las universidades colombianas.
La pasión del fútbol no solo se vive en la Copa América por estos días. En el Mundial de Fútbol Robótico que se realizará desde el 30 de junio en Leipzig, Alemania, la selección tricolor también aseguró su cupo. Se trata del equipo de robots desarrollado por el Grupo de Estudio y Desarrollo en Robótica (GED) de la Facultad de Ingeniería Electrónica de la Universidad Santo Tomás, que, por sexto año consecutivo, representará a Colombia en el evento científico de robótica más importante del mundo: RoboCup 2016.
El equipo de la Universidad Santo Tomás se enfrentará este año a 20 equipos de 12 universidades de diferentes continentes. Algunos de los robots fueron nombrados Asprilla, Rincón, Higuita, “El Pibe”, James, en honor a las glorias del fútbol colombiano.
La Selección Colombia de robots es diseñada y programada por Carlos Andrés Quintero, Saith Rodríguez, Eyberth Rojas, Katherín Pérez, Heyson Báez, Oswaldo Peña y Andrés Reyes, docentes y estudiantes de Ingeniería de la Universidad Santo Tomás.
«Este año vamos por la copa, para lo cual hemos mejorado las técnicas de inteligencia artificial que nos permitirán elaborar jugadas más complejas, predecir el comportamiento del equipo contrario y recuperar la bola de una manera más rápida» señaló Quintero.
Llama la atención que desde el inicio del partido los robots son programados para que sean autónomos y puedan predecir respuestas del equipo contrario. Es decir, en el campo de juego se ponen a prueba los desarrollos tecnológicos en robótica móvil, visión e inteligencia artificial, materializados en las técnicas y comportamientos cooperativos de los robots, así como en la precisión para marcar goles y hacer y recibir pases.
Algunos de los robots, nombrados en honor a las glorias del fútbol colombiano —Asprilla, Rincón, Higuita, “El Pibe”, James— se enfrentarán este año a 20 equipos de 12 universidades de diferentes continentes.
Los integrantes del equipo tomasino de robots tienen tracción omnidireccional de cuatro ruedas, usan motores sin escobillas de 50W controlados por un sistema embebido hecho a la medida, y dispositivos de pateo de la pelota para pases frontales y parabólicos.
El sistema de inteligencia artificial está desarrollado con lenguaje C++ sobre una plataforma Linux y una comunicación inalámbrica RF bidireccional a 2.4 GHz con los robots.
Los futbolistas robóticos de la Universidad Santo Tomás han participado en diferentes competencias nacionales e internacionales dejando en alto el nombre de nuestro país y ratificando la calidad de las investigaciones que se desarrollan en las universidades colombianas.
RoboCup 2016
En RoboCup 2016 las reglas del juego, tarjetas y fases eliminatorias son muy similares a las del fútbol tradicional. En una cancha de 9x6 m se ubican cuatro cámaras a través de las cuales llega la información a los equipos para definir la actuación y comportamiento de los robots. La bola utilizada en el juego es una pelota de golf estándar.
Los partidos tienen una duración de dos tiempos, de 10 minutos cada uno, con un intermedio de 5 minutos. No hay límites de cambios: en cualquier momento un robot puede ser reemplazado; se dispone de 5 minutos de timeout en total para realizar mantenimiento o reajustes al robot o para modificar la estrategia del equipo. Durante el juego no es posible realizar cambios en el código de programación, ni se acepta la intervención humana sobre los robots.
Dos humanos son designados como jueces del equipo, uno principal y otro auxiliar, y se cuenta con la asistencia de un juez automático cuya función es definir la existencia de faltas, los saques de los equipos, controlar los tiempos de juego y amonestar robots con tarjeta amarilla o roja. Estas amonestaciones son por exceso de fuerza de los robots o por impedir el desarrollo normal del juego y obstaculizar el saque del equipo contrario.
Cada vez que finaliza un partido los robots entran en una etapa de mantenimiento donde se hace limpieza de ruedas, se lubrican los elementos mecánicos y se recargan baterías. La falla en los robots normalmente corresponde a desgaste en sus elementos o averías por choques.
Este campeonato, fundado en 1998, planea que para el 2050 un equipo de fútbol de robots humanoides se enfrente y gane al campeón mundial de la FIFA. No sería la primera vez que un robot supere al número uno en una disciplina, como ocurrió en 1996 cuando la súper computadora Deep Blue venció al campeón mundial de ajedrez, Gary Kaspárov.
Fuente:
http://tomasnoticias.usta.edu.co/